jueves, enero 04, 2007

Cualquier mirada, cualquier palabra desde tu sillón, es carne para mi ilusión..


Jugando, me acechabas agazapado, cachorro incansable, saltabas sediento sobre mí, atrapándome, deslumbrándome.
Observabas todos mi movimientos, con paciencia sabia y envidiable; me volvía predeciblemente tu presa.
Planeabas tu ataque nocturno, sabías exactamente dónde dar el golpe, agresivo, felino, violento.
Tu mirada soberbia me desmenuzaba lentamente; salvaje, desgarrabas mi carne, saboreabas mi sangre, orgulloso en tu cacería, agotado, extasiado, te dormías en mis brazos.
Satisfecho, impregnado en mis fluidos, huías escurridizo, desechando vestigios, dejando tu huella imborrable, marcando el territorio para siempre.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

es increible los sentimientos que pones en cada palabra, me encanta como describis las imagenes que tenes donde se mezcla la metafora con las cosas que nos pasan, te quiero nena. que estes bien.